Isaías 33,13-16
Los lejanos, escuchad lo que he hecho;
los cercanos, reconoced mi fuerza.
Temen en Sión los pecadores,
y un temblor agarra a los perversos;
«¿Quién de nosotros habitará un fuego
devorador,
quién de nosotros habitará una hoguera
perpetua?»
El que procede con justicia y habla con
rectitud
y rehúsa el lucro y la opresión,
el que sacude la mano rechazando el
soborno
y tapa su oído a propuestas
sanguinarias,
el que cierra los ojos para no ver la
maldad:
ése habitará en lo alto,
tendrá su alcázar en un picacho rocoso,
con abasto de pan y provisión de agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario